Hace unos días atrás recibí un correo electrónico de un profecional en servicios relacionados, denunciando la negación de algunos maestros de sala regular, a ofrecer los acomodos razonables establecidos en el PEI, incluso la determinación de fracasar a estos estudiantes participantes del PEE. Capacitar al maestro de sala regular para ofrecer los acomodos correspondientes a sus estudiantes de EE y que éste asuma la actitud apropiada para ofrecerlos, es y ha sido uno de los retos mas grandes que confronta día a día el proceso de integración del Programa de EE a la Corriente Regular.No obstante, ningún maestro, equipo de maestros, director, padre o COMPU puede tomar la determinación de fracasar a un estudiante. Esa practica es ilegal e inescrupulosa. El estudiante se enfrenta al fracaso cuando ,luego de haber agotado todos los recursos , programas y acomodos necesarios, lamentablemente, no domina las destrezaz del grado. Incluso aún no dominando dichas destrezas, se podría considerar la promoción de grado, asumiendo un programa interdisciplinario, coordinado, aplicando los acomodos apropiados y necesarios para ese estudiante, de manera que éste, junto a un equipo de profecionales comprometidos, pueda trabajar su resago en las áreas de mayor dificultad, sin dejar de avanzar en las que si domina o comprende mejor, siendo esta ultima alternativa, lo que hace tan maravilloso el Programa de Educación Especial. Creo en el PEE, entiendo que el mayor problema que confronta, es el desconocimiento que aun, los llamados especialistas, tienen del mismos. El que no conoce es como el que no ve. Una de las áreas, hacia donde debemos dirigir, seriamente, nuestros esfuerzos, es a la capitación de nuestros profecionales y la creación de herramientas administrativas que, garanticen el mayor grado de profecionalismo y compromiso de éstos. Los programas ya están, los servicios también, los estudiantes que necesitan los servicios ya están identificados... ¿Qué nos resta? Profecionales capacitados, comprometidos, con un alto sentido de responsabilidad ministerial, auto disciplina y sencibilidad. Lamentablemente, el deterioro social que enfrentamos, está peligrosamente alcanzando las riveras de las aguas que nutren la esencia de un pueblo...
el conocimiento y el amor al prójimo como a sí mimo. Hasta que no veamos a ese nene que molesta, que es bruto, que no aprende, no se esta quieto, es agresivo y lo que habla son disparates....hasta que no lo veamos como mi nene, al cual tengo que mantener ocupado en tareas que capten su atención e interés, el cual me reta cada día a buscar nuevas alternativas, a salirme de lo cómodo para entrar en lo desconocido, mi nene a quien la frustración lo desespera, al no poder comunicarse con los demás... pero a quien con un abrazo, la palabra suave, el mirarle a los ojos y decirle: toma tu tiempo, calmate y vamos a intentarlo una ves más... Hasta que no veamos a los diferentes como iguales, tan dignos y merecedores de todo lo mejor como nosotros mismos... hasta que ese maravilloso día, se convierta en hoy, en vano será nuestro esfuerzo.
Conocimiento, compromiso y empatía.... quien lo hubiera imaginado, que el trato con los diferentes me llevaría ser igual.
